1) Amarás la compra de tu casa sobre todas las cosas.
Sólo hay una actividad lícita, única y verdadera, que existe sobre todas las cosas: la compra de inmuebles. A ella te entregarás en cuerpo y alma.
2) No tomarás el nombre de tu hipoteca en vano.
Tu hipoteca es lo más sagrado que existe. Deberás sacrificar cualquier cosa con tal de hacer frente a tu hipoteca.
3) Santificarás a Gil y Gil, a Paco "el Pocero" y Julián Muñoz.
Son los nuevos mártires de nuestro tiempo y claros ejemplos a seguir.
4) Honrarás a tu banco o caja.
Honrarás a tu banco o caja con unos intereses crecientes mes a mes. Además le pedirás otra hipoteca, independientemente del Euribor, de la tendencia del mercado, o del precio del inmueble.
5) No dirás que hay burbuja inmobiliaria.
Esto es una blasfemia completamente imperdonable. Repudiarás a aquellos que creen en ella y esperan a que rebiente.
6) No dirás que el Euribor va a subir.
Perseguirás a aquellos infieles que lo afirman.
7) No dirás que el precio de la vivienda va a bajar ni que hay especulación.
Tales blasfemias son indignas e impropias de un buen pepito.
8) No vivirás de alquiler.
Repudiarás a aquellos que lo hacen, con la falsa esperanza de que las viviendas van a bajar.
9) No comprarás mañana lo que puedas comprar hoy.
Pues el precio siempre va a subir, y una pérdida de tiempo significa una pérdida de dinero.
10) No consentirás que no haya especulación.
Especularás con todos tus bienes. Acudirás a la inmobiliaria todos los días, incluídos los domingos y las fiestas de guardar, para ver en su escaparate las nuevas ofertas.
Y hermanos, un nuevo mandamiento os doy: Especulaos los unos a los otros como yo os he especulado.
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